De la Teoría a la Acción: El Poder del Aprendizaje Basado en Casos y los Juegos de Guerra en la Formación Militar.

Autor:

Víctor Xavier Enríquez Champutiz

Diplomado en Neurodidáctica

Fecha de Publicación: 25/11/2024 

En el ámbito de la educación militar, la eficacia de los métodos de enseñanza es fundamental para preparar a los oficiales a enfrentar entornos cada vez más complejos y dinámicos. Entre los enfoques pedagógicos predominantes en la formación militar destacan el aprendizaje tradicional y el aprendizaje basado en casos. Si bien ambos tienen su relevancia, el primero se enfoca en la transmisión de la doctrina, el segundo demuestra una capacidad superior para fomentar habilidades críticas en los oficiales, fomentando un pensamiento crítico y adaptativo.

En la Academia de Guerra Aérea de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), los juegos de guerra, constituyen una forma avanzada de aprendizaje basado en casos, convirtiéndose en una herramienta esencial para preparar a los futuros líderes militares para afrontar escenarios volátiles, inciertos, complejos y ambiguos (VICA). 

El aprendizaje tradicional se basa en la instrucción directa, la lectura de manuales y la memorización de conceptos claves para el alumno militar. Este método asegura una base teórica sólida y homogénea entre los alumnos militares, permitiendo que todos dominen los fundamentos doctrinarios. Aunque eficaz para los cursos iniciales, como el de Promoción o Básico, su enfoque teórico limita la experiencia práctica que los oficiales necesitan para tomar decisiones en escenarios reales

«la educación no es preparación para la vida; la educación es la vida misma»

Dewey (1938)

Leer más en el artículo Reevaluando la Educación Militar: Construcción, Deconstrucción y Reconstrucción:

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Por otro lado, el aprendizaje basado en casos va un paso más allá al colocar a los alumnos en situaciones reales o simuladas donde deben analizar problemas, formular estrategias y tomar decisiones críticas, tomando como base el Trabajo Integrado del Estado Mayor TIEM, por ello es crucial que el fundamento doctrinario sea dominado en forma homogénea entre los estrategas.

Este enfoque, fundamentado en la teoría de aprendizaje experiencial de Kolb (1984), sostiene que «el conocimiento se crea a través de la transformación de la experiencia».

Para los cursos como el Avanzado y el Estado Mayor, los juegos de guerra representan un complemento invaluable al aprendizaje basado en casos, al recrear escenarios operativos complejos en el ámbito externo e interno que deben simular los desafíos actuales. 

Los juegos de guerra, además, permiten a los alumnos militares experimentar condiciones similares a las de un conflicto real, enfrentando decisiones estratégicas y tácticas BAJO PRESIÓN. Este tipo de formación desarrolla competencias esenciales como el liderazgo, la capacidad de análisis y la adaptación en contextos de alta incertidumbre. La experiencia internacional refuerza esta perspectiva. Por ejemplo, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha integrado los juegos de guerra en su programa educativo para preparar a los oficiales a enfrentar conflictos multidimensionales.

Ejercicios como Steadfast Jupiter y Trident Juncture combinan simulaciones operativas y estratégicas para entrenar a los líderes en escenarios de guerra híbrida y ciberseguridad.

Estos ejercicios fomentan la coordinación multinacional, el análisis en tiempo real y la toma de decisiones basadas en información incompleta, habilidades esenciales en los teatros operativos modernos. 

La experiencia de la OTAN demuestra que los juegos de guerra no solo fortalecen las capacidades tácticas y estratégicas, sino que también fomentan el trabajo en equipo entre unidades de diferentes países. Este enfoque colaborativo es adaptado en la Academia de Guerra Aérea de la FAE para ejercicios conjuntos con otras ramas de las Fuerzas Armadas del Ecuador.

De manera similar, en Colombia, la experiencia adquirida en el combate contra grupos armados ilegales ha llevado a la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) a utilizar juegos de guerra para entrenar a sus oficiales en la planificación de operaciones en escenarios de guerra irregular. Ejercicios como Águila de Acero integran simulaciones de interdicción aérea, operaciones conjuntas y misiones de rescate en territorios hostiles. La aplicación de casos basados en las amenazas internas de Colombia ha demostrado la importancia de adaptar los escenarios educativos a las realidades geográficas y políticas de cada nación. Para la FAE, esta experiencia resalta la necesidad de desarrollar simulaciones centradas en el combate al narcotráfico, la minería ilegal y la defensa de la soberanía en la región fronteriza. 

A partir de estas experiencias, resulta evidente que la implementación del aprendizaje basado en casos en la Academia de Guerra Aérea debe adaptarse a las particularidades de los desafíos nacionales e internacionales. A continuación, se presentan algunas estrategias concretas desde la perspectiva y experiencia del autor para integrar este enfoque pedagógico en la formación de los oficiales de la FAE: 

Elaboración propia

Estrategias para implementar el aprendizaje basado en casos 

1. Casos relevantes y contextualizados en el escenario Ecuador: Los escenarios deben reflejar las amenazas y retos que enfrentan las Fuerzas Armadas del Ecuador, como la seguridad fronteriza, la interdicción aérea contra el narcotráfico y las crisis humanitarias. La integración de casos basados en experiencias reales, como las de Colombia, permitirá a los alumnos analizar situaciones complejas y formular soluciones innovadoras, forzando a los estrategas a pensar más allá del cubo, llegando a comprender que NO EXISTEN LOS SALVADORES, sino un eficaz trabajo en EQUIPO.

2. Integración teórico-práctica: Los casos deben vincularse con la doctrina y los conceptos teóricos impartidos en clase. Esto fortalece la conexión entre el conocimiento adquirido y su aplicación práctica, preparando a los oficiales para responder con eficacia en el campo; así como también motiva a la RECOSNTRUCCIÓN de la doctrina en pos de la mejora continua y la modernización en las estrategias y tácticas que deben adaptarse a un escenario VICA, en donde la única certeza es EL CAMBIO.

3. Toma de decisiones bajo presión: Las simulaciones deben incluir elementos de incertidumbre, como información incompleta, limitaciones de tiempo y recursos, para recrear las condiciones de una operación real. Este enfoque fomenta la resiliencia y el juicio militar. 

4. Trabajo en equipo y liderazgo: La resolución de casos en EQUIPOS MULTISCIPLINARIOS simulan las dinámicas reales de una unidad militar. Esto no solo fortalece las habilidades de liderazgo, sino que también promueve la comunicación efectiva y la cohesión entre los miembros del equipo. 

«La fuerza de un ejército radica en el espíritu de equipo y la cooperación, no en el individuo.»

General Dwight D. Eisenhower,

5. Retroalimentación continua: La evaluación no debe centrarse únicamente en los resultados, sino también en el proceso de toma de decisiones. Lo oficiales que tiene el enfoque de facultad, deben proporcionar análisis detallados y retroalimentación que permitan a los alumnos reflexionar y mejorar en futuras simulaciones; cada ejercicio debe constituir un proceso de CONSTRUCCIÓN, DECONSTRUCCIÓN Y RECONSTRUCCIÓN del Juego de Guerra.

6. Uso de tecnologías avanzadas: El empleo de simuladores de sistemas de mando y control, y análisis post-ejercicio, como los implementados por la OTAN, puede enriquecer las simulaciones y brindar un entorno más realista para los alumnos, enfocado en los resultados, lejos del sesgo subjetivo de la experiencia de quienes cumplen con la función de facultad evaluadora.

Conclusión

La combinación del aprendizaje tradicional y el aprendizaje basado en casos, en particular los juegos de guerra, proporciona una formación integral para los oficiales de la Fuerza Aérea Ecuatoriana. Mientras que el método tradicional asegura una base doctrinaria sólida, los casos y las simulaciones permiten a los alumnos aplicar sus conocimientos en situaciones complejas y dinámicas, desarrollando habilidades críticas como el liderazgo, la toma de decisiones y el trabajo en equipo. 

Tanto las experiencias de la OTAN como las de Colombia demuestran que los juegos de guerra son una herramienta poderosa para preparar a los oficiales ante las complejidades del campo de batalla moderno. Adaptar estas lecciones al contexto ecuatoriano garantizará que la Academia de Guerra Aérea forme líderes capaces de enfrentar los desafíos actuales y futuros con eficacia y determinación que requiere la Patria.

Como afirmó Carl von Clausewitz: «En la guerra, todo es simple, pero lo simple es difícil». Preparar a los oficiales para manejar esta dificultad es, en última instancia, el objetivo de una educación militar efectiva. 

Confío en que este artículo haya proporcionado una visión clara y reflexiva sobre el propósito y el impacto de los juegos de guerra en la formación de los futuros líderes de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, destacando su papel como una herramienta clave para enfrentar los desafíos estratégicos y operativos del mundo moderno.

“Quien no asume el desafío de proponer algo distinto, se resigna a permanecer en los márgenes de la mediocridad.”

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  • BIBLIOGRAFÍA ANALIZADA

– Dewey, J. (1938). Experience and Education. Kappa Delta Pi. 

– Kolb, D. A. (1984). Experiential Learning: Experience as the Source of Learning and Development. Prentice-Hall. 

– NATO. (2023). Steadfast Jupiter Exercise Report.

– Fuerza Aérea Colombiana (FAC). (2022). Informe de Ejercicios Águila de Acero. 

– Von Clausewitz, C. (1832). On War. Princeton University Press. 

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