Autores:
Víctor Enríquez Champutiz
Javier Aguilar Cazar
Gerardo Benavides Montenegro
Publicado: 10/06/2024
No se trata de un artículo político…. se trata de un llamado a la búsqueda de coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace.
El 31 de mayo de 2024, la vocera del gobierno, Diana Jácome, manifestó que “Los ecuatorianos salen a trabajar con mayor tranquilidad». Sin embargo, esta declaración pone de manifiesto la desconexión entre la percepción de seguridad, los índices de violencia y el Ejecutivo. Días más tarde, el presidente Daniel Noboa emitió el Decreto 290, disponiendo el traslado de la cúpula policial y militar a la ciudad de Manta, con el objetivo de contener la ola de violencia y criminalidad que ha azotado a la ciudad y otras zonas de la provincia de Manabí en las últimas semanas. Los titulares de prensa denotan la expectativa por los posibles resultados, tales como la reducción inmediata de la violencia, un mayor control del territorio y la recuperación de la confianza ciudadana.
En un giro inesperado, los boys scouts (denominación que se les dio en el gobierno anterior) pasaron a ser considerados terroristas y objetivo militar desde enero/2024. La amenaza evoluciona y muta con cada acción emprendida por la fuerza pública. Los resultados del denominado Bloque de Seguridad, que incluyen la incautación de las sustancias sujetas a fiscalización, el control de armas y la contención en las cárceles, así como la reducción de la influencia política en la delincuencia organizada, han obligado a estos grupos delincuenciales a delimitar su territorialidad e influencia. Buscan diversificar sus actividades, como la extorsión, vacunas, sicariato, secuestro, para continuar desarrollando actividades al margen de la ley y garantizar un ingreso de recursos económicos.
Sin duda, la efectividad de los decretos dependerá de su correcta evaluación e implementación, así como de la coordinación integral entre las diferentes fuerzas de seguridad. Sin embargo, existe el riesgo de que el efecto inmediato sea el traslado de esta violencia a otras regiones de nuestro país, en lo que se conoce como el juego del gato y el ratón.
Es fundamental comprender que la seguridad integral no es una responsabilidad exclusiva del Ejecutivo, representado por el Ministerio de Defensa Nacional, las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional. El Decreto 290, además de su propósito explícito, también tiene un efecto disuasorio. Se espera que las acciones emprendidas contribuyan directamente a disminuir los índices de criminalidad y violencia. Para lograrlo, es imperativo contar con el compromiso de todas las funciones y poderes del Estado en la lucha contra la delincuencia en todos sus niveles…. así estamos al momento:
Resulta crucial que desde el Ejecutivo se creen las condiciones adecuadas para restablecer e impulsar el desarrollo productivo nacional. Esto implica generar fuentes de trabajo y una inversión pública eficiente y responsable en educación y salud. Asimismo, se debe trabajar en restaurar un ambiente de bienestar y paz para toda la población, especialmente para aquellos más vulnerables. Estos últimos han sido cautivados por ofertas de dinero fácil o amenazas directas, y es necesario brindarles opciones más seguras y legítimas.
Recordemos que el Presidente de la Asamblea, Henry Kronfle, en la posesión del presidente Daniel Noboa, manifestó: “Lidere usted al Ecuador hacia un futuro de paz, seguridad, progreso y libertad”.
Sin embargo, la Asamblea Nacional ha tomado un camino divergente y se ha alejado del objetivo común de paz y seguridad. Han impuesto agendas partidistas en búsqueda de resultados particulares, desviándose del apoyo a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. Entre las actividades más notorias se encuentran los juicios políticos, comparecencias, exhortos y la conformación de mayorías móviles, que se han convertido en shows mediáticos que ponen en duda las verdaderas intenciones del legislativo.
Los grupos políticos que hicieron campaña por el NO en la consulta y referéndum de febrero/2024 han dejado en claro que la paz y seguridad no son su prioridad. Su enfoque está puesto en las elecciones de 2025, donde buscan presentarse como la solución mesiánica a todos los problemas del Ecuador. Esto recuerda a la película “Su Excelencia” (1967), en la que Mario Moreno «Cantinflas» manifestaba:
«Estamos peor, pero estamos mejor. Porque antes estábamos bien, pero era mentira. No como ahora que estamos mal, pero es verdad«
Mario Moreno Cantinflas
En este complejo escenario, los miembros de la ONG Comité Permanente para la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) han cuestionado y exigido la salida de los militares de las cárceles debido a supuestos maltratos y privación de alimentos. Sin embargo, estas mismas organizaciones no se pronunciaron cuando el SNAI, a través de la empresa LA FATTORIA, era responsable de la alimentación en las cárceles. Como un secreto a voces, los líderes de cada pabellón cobraban por la comida que llegaba por parte del Estado… cuánta doble moral.
Es necesario que todos los poderes del Estado rindan cuentas y se observen sus omisiones que han impedido que los uniformados realicen su trabajo en pos de la paz y seguridad como objetivo común, independientemente de banderas, colores e intereses partidistas. No se trata de ideología, sino de sentido común, aunque lamentablemente este sentido sea el menos común entre los actores políticos.
Hoy los uniformados se encuentran inmersos en una GUERRA que ha sido declarada por el poder político. Luchan en un escenario que ha tomado años conformarse, en parte debido a decisiones e intereses políticos. Como en toda guerra, los daños colaterales son esperados y en la nuestra ya son una realidad. Como sociedad, debemos asegurarnos de que esos daños no recaigan sobre los ciudadanos honestos y trabajadores.
Enfrentar una guerra plantea desafíos significativos que van más allá de la confrontación militar directa y requieren una estrategia integral. Como bien expresó Sun Tzu, autor de “El Arte de la Guerra”: “El verdadero soldado no lucha porque odia lo que tiene delante, sino porque ama lo que tiene detrás”, quien más que el soldado ecuatoriano para entenderlo. Aunque esta frase nos recuerda la importancia de proteger a la población civil y trabajar hacia un futuro de paz y seguridad, las fuerzas del orden no deben olvidar que enfrentan amenazas cambiantes. Su efectividad dependerá de la coordinación, la adaptabilidad y de comprender una vez más la conocida afirmación de Clausewitz, aquella que la guerra nunca será un fenómeno aislado, sino la continuación de la política por diferentes medios.
Triste realidad de nuestros pueblos.
Referencias
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Blog Víctor Enríquez 
TOmado del Whatapp, aporte Iván B.
Muchas gracias por exteriorizar y compartir sus ideas… Muy buena reflexión, de hecho excelente por todos lados…
La crítica política, al final resulta ser una crítica que decanta en el aspecto social. Porque se vislumbra cómo a los pies de la lucha de estas “castas”, se encuentra atado el espejo social del Ecuador. Un espejo que refleja la ignorancia de nuestro pueblo, que se ha polarizado por los dogmatismos y fundamentalismos de las ideologías y revanchismos originados por la “política”, los cuales han creado fantásticos ideológicos irracionales que desconocen por completo la necesidad de una integración nacional.
Lastimosamente, en nuestro país, a pesar de necesitar dinero urgente para invertir en desarrollo y seguridad, nosotros (la gente) seguimos gastando en entradas para asistir a ver aquellos circos donde acampan payasos que buscan hacer show con todos aquellos que ingresan a sus carpas.
La reflexión enseña que nos falta conciencia para crear un conocimiento que permita deconstruir ideas y transformar acciones en este mundo que muta permanentemente. Charles Darwin decía que en este mundo no sobrevive el más fuerte o el más inteligente, sino aquel que se adapta mejor a los cambios.
Hemos aprendido a echarle la culpa al pasado para justificar un estancamiento presente y el hundimiento futuro. No llegamos a comprender que el pantano de la ignorancia nos sigue intentando hacer desaparecer si no nos convertimos en algo diferente.
Nuevamente gracias por sus ideas expresadas y compartidas que nos obligan a ir a campos de reflexión diferentes.
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Tomado del whatapp. ANÓNIMO
Saludos cordiales, un análisis de lo que está pasando, a los ojos de analistas que conocen del tema de seguridad y defensa, sin embargo, los políticos del momento no saben que es lo que pasa y no tienen la más mínima idea de cómo enfrentar la situación delictiva por la que el pais atraviesa.
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