1 de mayo, Día Universal del Trabajo.

“El trabajo es la oración del pobre y del rico, pero el azote del holgazán y vago”

El primero de mayo se celebra el Día Universal del Trabajo, como una forma de resaltar la importancia del trabajo y la contribución misma de los trabajadores a la sociedad. Esta fecha tiene su origen en la lucha de los trabajadores por mejores condiciones laborales.

La historia se remonta a finales del siglo XIX, cuando los trabajadores eran tratados como herramientas de producción, sin ningún tipo de derecho o protección, semilla para el surgimiento del movimiento obrero que luchó por la dignidad y los derechos de los trabajadores. Se destaca entonces la huelga de los trabajadores de la fábrica McCormick de Chicago en 1886, que terminó en una violenta represión por parte de la policía y la muerte de varios trabajadores.

En este contexto, el Congreso Internacional Socialista reunido en París en 1.889, consagró el primero de mayo como día Universal del Trabajo y fue decretado por la Federación de Asociaciones Obreras de Estados Unidos y Canadá en 1.884, para conmemorar las conquistas de los trabajadores, que finalmente se consiguió a costo de grandes sacrificios.

En la actualidad, en el Ecuador el Día Universal del Trabajo sigue siendo una fecha muy relevante, incluso por las desigualdades que persisten. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la tasa de desempleo en marzo de 2023 fue del 3,6%; el 32,9% de la población económicamente activa de Ecuador trabajaba en empleos formales, mientras que el 67,1% trabajaba en empleos informales; la tasa de participación laboral de las mujeres fue del 55,5%, mientras que los hombres fueron del 81,6% y lamentablemente alrededor de 384.000 niños y niñas involucrados en trabajo infantil.

Es importante seguir luchando por la dignidad y los derechos de los trabajadores y el Día Universal del Trabajo es una oportunidad para recordar esta lucha y para reivindicar la importancia del trabajo en la sociedad. Este día también nos recuerda que el trabajo es un derecho humano fundamental y que los trabajadores merecen un trato justo y digno.

Para los soldados que tenemos la misión de defender la soberanía e integridad territorial, apoyar a la seguridad integral del Estado y brindar apoyo en situaciones de emergencia y catástrofes naturales; debemos levantarnos cada día con la frente en alto y sentirnos orgullosos de vestir el uniforme, seguros que con nuestro trabajo engrandemos a nuestro país y podemos dar bienestar a nuestra familia, cumpliendo del mandato divino “te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado”.

Continúa navegando en el blog:

Sigue mi blog

«Sé tú mismo, los demás puestos están ocupados» Oscar Wilde