Pensamiento estratégico del capitán Stephen Wentworth Roskill

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Un sinnúmero de pensadores ha aportado a lo que hoy conocemos como pensamiento estratégico; pero en forma general: ¿qué es el pensamiento estratégico?; para los coroneles Christian Romero y Rodolfo Prado en su artículo “Historia militar y pensamiento estratégico”, queda definido como:

Una disciplina dentro del estudio de las ciencias militares, que busca analizar el desarrollo, evolución y aplicación de preceptos teóricos y doctrinarios del arte y ciencia de la conducción militar a través de la historia, basándose en la revisión documental de los más relevantes tratadistas e historiadores, permitiendo con ello mejorar la comprensión de los fenómenos asociados a la conducción militar

(Romero & Ortega, 2015).

En este contexto, el presente artículo analiza el aporte a la Estrategia Marítima o Estrategia Naval del capitán Stephen Wentworth Roskill, partiendo de su reseña histórica, conociendo su pensamiento estratégico y determinando finalmente su significativa contribución al ámbito naval.

Palabras clave: Stephen Roskill, estrategia naval, estrategia marítima, pensamiento estratégico.

Reseña bibliográfica

Stephen Wentworth Roskill, nació en Londres el 1 de agosto de 1903 , a la corta edad de 14 años decide unirse a la Royan Navy  sirviendo como guardiamarina en el crucero ligero Durban durante su paso por la estación de China. Su vocación de servicio le lleva a formarse también como oficial de artillería, para posterior ser asignado al acorazado HMS (His/Her Majesty’s Ship) Royal Sovereing y al portaviones HMS Eagle desde 1933 a 1935. Miembro del Estado Mayor Naval entre los años 1939 y 1941, sería asignado luego al HMS Leander en 1943 participando directamente en el enfrentamiento contra la Armada Imperial Japonesa, en donde el HMS Leander fue torpedeado, sufriendo daños de consideración (Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 160)..

Más tarde, se desempeñaría como observador en las pruebas atómicas realizadas en el Atolón Bikini en 1946, llegando finalmente a desempeñarse como subdirector de Inteligencia del Almirantazgo entre los años 1947 y 1948, año en el cual se retiraría por el aumento de su sordera como consecuencia de las detonaciones de las armas durante su carrera militar.

En su retiro recibió un sinnúmero de reconocimientos por su aporte como historiador oficial de la Segunda Guerra Mundial, incluso llegó a ser designado como Miembro Superior Investigador en el Churchill College, hasta su fallecimiento el 4 de noviembre de 1982.

Principales aportes a la Estrategia Marítima o Estrategia Naval.

     Las características geográficas de Gran Bretaña han obligado a este país a dar gran importancia al Poder Naval, centrando su atención en el control de las líneas de comunicación en el mar, consideradas como elementos estratégicos trascendentales, así como la negación de las mismas en caso de conflicto armado.

En ese contexto, el capitán Roskill enmarca su pensamiento dentro de la denominada Escuela de Estrategia Marítima Inglesa, realizando su análisis en base a los errores tácticos y estratégicos de la Primera y Segunda Guerra Mundial.

En el siguiente esquema puede visualizarse de forma resumida el aporte de la Escuela de Estrategia Marítima Inglesa:

Obras literarias

Las obras del capitán Roskill se fundamentan en el pensamiento de la Escuela de Estrategia Marítima Inglesa, donde  destacan aspectos doctrinarios como el uso de los avances tecnológicos, el control del mar, los principios de la conducción, lateoría del primer objetivo, entre otros; todos ellos quedaron plasmados en muchas obras literarias (Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 160), entre las principales se puede citar:

  • Claude Francis Webster (1945)
  • The War at Sea (1939-1945), tres volúmenes (1954, 1957, 1960-1961)
  • Escort, the Battle of the Atlantic (1955)
  • HMS Warsprite (1959)
  • The Secret Capture (1959)
  • The Navy at War (1960)
  • The Strategy of Sea Power (1962)
  • A Merchant Fleet in War (1962)
  • The Art of Leadership (1964)
  • Naval Policy Between the Wars, dos volúmenes (1968, 1976)

Sin duda que su aporte principal se encuentra plasmado en la obra “La Guerra en el Mar”, dedicándole tres volúmenes en forma narrativa a la planificación naval de la Segunda Guerra Mundial, logrando consolidar el pensamiento estratégico de Winston Churchill mediante el análisis de las operaciones de la Royal Navy, trabajo que lo hace referenciando a pensadores navales famosos como Mahan y Corbett.

Pensamiento estratégico marítimo.

     El pensamiento estratégico marítimo de Roskill se sitúa posterior a la Segunda Guerra Mundial, destacando la importancia e influencia del uso de la tecnología en la determinación de nuevas estrategias, así como en el uso y explotación del Poder Marítimo; entre sus máximas podemos destacar:

“un medio de llevar Fuerzas abrumadoras para enfrentarlas con el enemigo en teatros escogidos por nosotros” (Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 161)

Se resalta la importancia de factor planeamiento y el contar con las mejores condiciones del entorno en donde se desarrollan las operaciones navales, mediante el desarrollo de una estrategia marítima.

De su pensamiento estratégico se han derivado las siguientes reflexiones y aportes en cada uno de los siguientes aspectos:

Estrategia Marítima

El Capitán Roskill establece que el propósito de la Estrategia Marítima es:

“obtener y conservar el control de los mares para el uso propio y negar tal control a los adversarios” (Hardy, 2005, pág. 523)

Pensamiento que se lo aplica tanto en tiempos de paz como de guerra, siendo la estrategia marítima una herramienta del Estado para el desarrollo y la consecución de los objetivos nacionales establecidos.

La reflexión sobre este tema queda determinada por la importancia de la adecuada conformación de los niveles de conducción de las operaciones, su relación con el nivel estratégico político y la determinación de las atribuciones y responsabilidades de cada nivel.

Se debe resaltar además la importancia del trabajo integrado entre los niveles de conducción, establecidos para alcanzar los objetivos planteados, así como la importancia de extender las coordinaciones con las otras fuerzas del poder militar y con aliados a nivel regional. Consecuente con su pensamiento, Roskill determina que el Poder Marítimo de un país debe considerar tanto a las Fuerzas Navales como a los elementos de su Marina Mercante, sumado al potencial industrial y a los elementos orgánicos de la Armada (bases, puertos, entre otros). (De Izcue, Arriarán, & Tolmos, 2012, pág. 34).

Estrategia Naval

Para el contexto naval Roskill establece que:

“La acción recomendada era forzar la batalla y destruir el comercio marítimo enemigo”

 (Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 162)

Para lo cual, era necesario obtener de forma inicial las mejores condiciones a través de un desarrollo de la maniobra estratégica marítima, soportada con acciones desequilibrantes como el bloqueo de bases enemigas y siempre abierta al apoyo de una Fuerza Organizada. Así se resalta la importancia del Poder Naval para mantener expeditas las líneas de comunicación marítimas y la incorporación de nuevos medios tecnológicos que coadyuven al objetivo de la estrategia naval: aeronaves, submarinos y minas navales, podrían ser de vital importancia.

Roskill realiza un análisis de las operaciones navales de la Segunda Guerra Mundial y hace importantes reflexiones en aspectos de la conducción de las operaciones navales; entre las más importantes:

  • La importancia de la relación, coordinación y asesoramiento al nivel político, por parte del nivel estratégico militar, a fin de establecer de forma planificada los objetivos, estados finales deseados y centros de gravedad, considerando las consecuencias políticas, militares, económicas e incluso culturales en cada uno de los niveles de conducción.
  • La importancia de la unidad de mando y la definición de las relaciones de mando y apoyo.
  • La inteligencia proyectada como una de las funciones operacionales imprescindibles para el proceso de toma de decisiones.
  • La relación entre la unidad de mando y la unidad de esfuerzo, determinadas para la consecución de un propósito común.

Poder Naval

En este campo, Roskil  materializa la siguiente contribución:

“la Fuerza organizada más débil debía eludir la batalla, en especial cuando se encontrará frente a la Fuerza adversaria en áreas abiertas que no le ofreciesen ningún resguardo o protección”

(Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 164)

En consecuencia, resulta de vital importancia establecer una posición variable que se ajuste al escenario, siempre apoyado en las bases que se disponga.

Tomado de fuentes abiertas

Concluye que las operaciones marítimas establecen que “el instrumento militar de la estrategia nacional puede ser utilizado en numerosas formas, variando en propósito, alcance, riesgos e intensidad de combate”.

Elementos del Poder Naval:

Luego de haber establecido los aportes del capitán Roskill, expresados en sus pensamientos estratégicos, se determina:

“la importancia de la Flota Naval y de la Voluntad Estratégica, para su utilización, componentes que se complementan con la concepción de la Posición Estratégica”

(Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 165).

En términos de ecuaciones, el poder marítimo y naval podrían expresarse de la siguiente manera:

Poder Marítimo  =          Poder Naval                +          Intereses marítimos

Poder Naval       =          (Fuerza x posición)     +          voluntad estratégico

Triunfo de la Guerra

El capitán Roskill concibe el triunfo de la guerra como “la victoria sobre la Fuerza Naval Adversaria en la batalla decisiva y destrucción del comercio marítimo del enemigo” (Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 162). Su idea se concreta en dos funciones generales históricamente determinadas por el hombre (Hardy, 2005, pág. 524):

  • La función económica: establecida para implementar y explotar el tráfico marítimo, defender las líneas de comunicaciones marítimas propias y, como se mencionaba anteriormente, negar su uso al enemigo.
  • La función militar: establecida para proyectar el Poder Militar de la Nación, evitando que el enemigo proyecte su fuerza

Relacionando las funciones anteriormente descritas con las operaciones militares ofensivas y defensivas, se obtiene las siguientes actitudes:

Tabla 1. Aplicaciones del Mar

FunciónActitud OfensivaActitud Defensiva
EconómicaAtacar las comunicaciones marítimas adversarias.Defender las comunicaciones marítimas propias.
MilitarProyectar el poder militar desde el mar sobre la tierra.Defenderse de la proyección del enemigo, evitando la invasión.
Tomando: (Hardy, 2005, pág. 523)

Control del Mar

Para el control del mar Roskill, determina el concepto que:

“las zonas de control deben ser variables en posición y desplazarse con las líneas de comunicación, es decir la Fuerza Organizada debe moverse junto con el área donde el Estado requiere mantener el Control del Mar” 

(Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 163).

Como era de esperarse, se determina también que no es necesario mantener el control absoluto del mar, sino ejerciendo un control general, al cual se denomina de tipo “abierto” (De Izcue, Arriarán, & Tolmos, 2012, pág. 158).

Objetivo Principal

El Capitán Roskill determinó que:

 “los principales objetivos que debían ser resueltos en la primera década del siglo XX eran la invasión, la protección del comercio marítimo y la guerra anfibia”

(Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 165).

Sobre este fundamento se estableció la Teoría del Primer Objetivo, dando paso a la fundación de la “Escuela de la Batalla Decisiva, según esta concepción, al comenzar la guerra, la Fuerza Organizada (escuadra) debería localizar y enfrentar la fuerza enemiga, con la finalidad de destruirla y, así, obtener el control del mar ” (De Izcue, Arriarán, & Tolmos, 2012, pág. 122).

El conocimiento y experiencia del capitán Roskill, logra una visión prospectiva de los objetivos que deben ser atendidos en el futuro. Por su parte, en el diseño operacional resulta imprescindible contar con el estado final deseado (EFD), una adecuada determinación de los centros de gravedad (CoG) y líneas de esfuerzo, mantener la seguridad del CoG propio yatacar al CoG enemigo para alcanzar el EFD.

Operaciones Navales

 En cuanto a las operaciones navales, Roskill consideró de:

 “de gran importancia adicionar a la estrategia marítima moderna las operaciones aeronavales y las operaciones anfibias”

(Estrategia marítima, evaluación prospectiva, pág. 165).

Las armadas del mundo, dentro de su organización cuentan con los elementos que hace mención Roskill, entre ellos: personal, medios, sistemas de armas y organizaciones pertenecientes a la fuerza de superficie, fuerza aeronaval y fuerza de submarinos, infantería de marina, unidades guardacostas y órganos de apoyo; estos elementos y medios se encuentran organizados para cumplir con un amplio espectro de operaciones navales.

CONCLUSIONES

El capitán Roskill realiza su aporte a la Estrategia Marítima y Estrategia Naval, desde la perspectiva de un país insular; sin embargo, sus enunciados han sido analizados y adaptados a los nuevos escenarios y amenazas por parte de las fuerzas navales del mundo.

Su pensamiento estratégico continua vigente y constituye una guía para la planificación y organización del Poder Naval de un Estado;, su  teoría del primer objetivo, su principio de seguridad (materializado en la posición variable y las bases), su  concepto de poder marítimo (fuerza naval + marina mercante + infraestructura + bases) y sus aportes a la estrategia marítima han logrado trascender en tiempos de paz y de guerra,  no menos importante han resultado sus contribuciones encaminadas a asegurar las líneas de comunicación marítimas, la visión de incorporar las aeronaves y submarinos como parte de su fuerza y la determinación de la posición estratégica, elementos que no deben faltar en la planificación naval.

Consecuente con el pensamiento de Roskill, en el contexto nacional, se evidencia una vez más la necesidad de contar con una fuerza naval con capacidad de proyección como una concepción estratégica de vital importancia en el empleo de sus escasos medios, llevarlo a la práctica demanda de un conjunto de capacidades que tienen que ver con el equipamiento y entrenamiento de sus medios. A pesar de que los escenarios han evolucionado de forma vertiginosa, nuestro país debería realizar los esfuerzos para alcanzar esta capacidad como una opción propia de una marina moderna que, sin descartar los principios tradicionales de su empleo, conserva su condición de estratégica

Es posible aplicar los aportes del capitán Roskill, al PODER AÉREO?

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BIBLIOGRAFÍA

De Izcue, C., Arriarán, A., & Tolmos, Y. (Abril de 2012). Apuntes de Estrategia Naval. Oficina de Desarrollo Bibliográfico de la Marina. Obtenido de http://virtual.esup.edu.pe/bitstream/ESUP/33/1/Apuntes%20Estrategia%20Naval.pdf

Estrategia marítima, evaluación prospectiva. (s.f.). Evolución del pensamiento estratégico con relación a la estrategia marítima y a la guerra en el mar, 119-297. Obtenido de https://esdeguelibros.edu.co/index.php/editorial/catalog/download/6/3/198-1?inline=1

Hardy, D. (2005). La proyección del poder militar a través del mar; máxima contribución naval al accionar conjunto. REVISMAR, 517-526.

Romero, C., & Ortega, R. (2015). Historia militar y pensamiento estratégico. Military Review, 65-78. Obtenido de Army University Press: https://www.armyupress.army.mil/Portals/7/military-review/Archives/Spanish/MilitaryReview_20151031_art009SPA.pdf

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